mi LIVING - antes & después

Todo comenzó con la pared de madera.

Hace tiempo tenía ganas de que el espacio donde paso más tiempo represente más mi estilo. Sí, el living ya había sufrido una transformación. Cuando me mudé, las paredes eran amarillo patito, el piso era oscuro y estaba muy gastado, y las puertas al balcón francés no cerraban del todo bien.

Primero, llegó la pintura blanca. Ahí ya empézó a tomar otra forma el ambiente, se sentía más fresco. Después, llegaron las nuevas puertas. Acá el cambio fue de la noche a la mañana. Me gustaron tanto que directamente saqué las cortinas. Pensar en taparlas me parecía un sacrilegio.

Y en enero del 2020 finalmente cambié los pisos. Son pisos vinílicos que se adhieren con pegamento doble contacto. Parecía fácil: se cortan con cutter, se pegan. El único tema es que mi plan era cambiar el piso en casi toda la casa, por lo que me llevó MESES. No me arrepiento en absoluto, pero si estás pensando en hacerlo en casa: pará cada media hora, estirá y después seguí. Tu cintura te lo va a agradecer. 

A esta altura, el espacio había cambiado mucho y me sentía mucho más a gusto que cuando recién me mude, pero todavía le faltaba algo. No sentía que representara lo que yo sabía hacer. Así que me propuse hacer algunos cambios más. 

Así había quedado el living con los primeros cambios. 

Y así empezó el nuevo cambio, con la pared símil madera en enero del 2022.

Hace tiempo quería hacer algo especial en esa pared del comedor, pero no terminaba de decidir qué. Había arrancado un modelo 3D del living, y nada de lo que probaba me terminaba de convencer, hasta que llegó esta idea 

El material es el mismo que el del piso, solo que como es una partida más nueva es un poquito más oscuro. La colocación fue rápida (unas tres horas como mucho) y ahora sí sentía que el ambiente estaba tomando forma, acercándose más a lo que yo quería. 

Cuando estuve conforme con los cambios en el modelo 3D pasé a hacer una lista de todas las tareas que tenía que hacer, y también a desglosar los costos. De a poco, empecé a sumar cambios:

  • Pinté la puerta de entrada del mismo color que el vanitory del baño.
  • Retapicé el sofá y el sillón de un cuerpo.
  • Hice almohadones nuevos.
  • Compré una alfombra del tamaño correcto para el living (la anterior eran dos pegadas que compré de oferta en Falabella)
  • Colgué la tele y sumé dos estantes de madera para poder colocar los libros, para sacarlos del comedor donde no entraban súper bien.
  • Pinté y retapicé las sillas.
  • Tapé el mural de la entrada y pinté un cuadro nuevo.
  • Recubrí el mueble de la entrada (el combinado para los amigos) con vinílico símil madera y le hice una tapa nueva.

Me llevó meses, pero teniendo el listado detallado de todas las tareas me ayudó un montón a ver cuánto estaba avanzando y qué tarea, aunque fuera pequeña, podía hacer.

Y así quedó:

 

 

Si este antes y después te dio ganas de hacer cambios en tu casa, te puedo ayudar con mis asesorías online.